Al anuncio de algunos medios de comunicación en la ciudad, debe
hacerse una reflexión, pues la construcción que comenzó a realizarse
sobre dos vías importantes en Ocaña no llena expectativas ni promete
solucionar el caos vehicular.
En 2010 el DNP realizó una inversión de más de $200 millones en el
Municipio de Ocaña en el Gobierno de Yebrail Haddad, con un estudio que
arrojó el Plan maestro de Movilidad y fue integrado en el plan de
desarrollo Nacional en el que, se definieron nuevos sentidos viales y
determinó algunas propuestas de rehabilitación y construcción de ejes
viales.
En el mismo documento del DNP, no existe propuesta alguna sobre
construcción de Puentes Intercambiadores para mejorar el flujo
vehicular, obra que para la nueva administración si parece ser
importante. Funcionarios de la Alcaldía dijeron a los medios que a
través de un conteo de carros se determinó que era necesario un puente
que conectara la parte final de una vía rápida (Paralela-Avenida) con la
calle Principal (Llanadas-Seguros) que comunica el centro de Ocaña con
la Avenida Principal.
El Mismo DNP resalta un modelo Monocéntrico-Lineal de la ciudad,
situación que evidencia la necesidad de abrir otros espacios para la
ciudad “alejados” de ese modelo. El “Puente intercambiador” propuesto
por la nueva administración Municipal, no solo generaría más conflicto
vehicular con el modelo Monocentrico-lineal (Principal Centro-Avenida)
si no que, es una contradicción y atenta contra los principios de la
Administración Pública como la planeación y la eficiencia en el uso de
los recursos públicos, invirtiendo para la construcción de dicho puente,
alrededor de 600 millones de pesos de regalías cuando ya se invirtió en
el pasado más de 200 millones pesos con la propuesta del DNP.
La situación anterior puede estar generándole un detrimento
patrimonial a la Nación pues esta obra aparece como vemos, de la nada,
contradiciendo lo estipulado por el Plan de movilidad para Ocaña de la
Dirección Nacional de Planeación.
La ubicación de dicha construcción es otra cuestión sobre la cual
reflexionar, pues a cada lado de la obra, a 80 metros de distancia cada
una, se encuentran 3 puentes que comunican con la Vía Rápida (Paralela).
Sorprende que, existiendo dichos conectores se pretenda construir un
nuevo Puente de doble carril y que para más sorpresa, no se tiene aún la
determinación de su sentido vial, es decir, dicho puente de dos
carriles y doble paso peatonal, estará o no destinado a utilizarse en un
solo sentido.
El documento : “Formulación del Plan de Movilidad de Ocaña” dice
textualmente “Los puentes vehiculares y peatonales que existen
garantizan la accesibilidad y comunicación entre los diferentes sectores
de la ciudad”, concluyendo de esta forma la inexistencia de razones
-suficientes- para llevar a cabo esta obra que puede convertirse desde
ya, en un puente sólo para el tránsito de Elefantes Blancos.
(La compra del Inmueble para demolición es otro debate)
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